Dejo caer sus besos como violetas |
PRIMAVERA
¿Qué miras, amante, qué miras?... Parece
que algo en tus ojos florece, florece...
Él no me contesta. Se acerca, me mira...
No sé si sonrie, no sé si suspira...
Y, en el hueco tibio de mis manos quietas,
deja caer sus besos como violetas.
VERANO
El sol de la tarde arde, arde, arde |
El sol de la tarde
arde, arde, arde.
Mi amante me mira, pero dice que
con el sol de cara, casi no me ve...
Yo río por nada, con mi risa loca
y él besa mi risa besando mi boca.
Bajo sus pupilas de deseo llenas,
el beso, lo mismo que el sol de la tarde
arde, arde, arde, dentro de mis venas.
¡Qué dulces las uvas dulces!
¡Qué verdes tus ojos claros!...
Tú me mirabas, mirabas;
yo comía grano a grano...
Y de pronto te inclinaste,
y me tomaste en los labios,
húmedos de zumo y risas,
un beso goloso y largo.
El rostro lívido y yerto
del invierno se asomaba
a los cristales bañados
en llanto, de la ventana.
Llegaste de fuera, herido
de lluvia y vientos helados.
Tus manos,duras de frío,
se arroparon en mis manos.
Un beso fundió la nieve
que traías en los labios.
Ángela Figuera Aymerich.
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